jueves, 29 de septiembre de 2011



Hace unos 100 millones de años los ancestros de los mamíferos placentarios modernos dejaron de llevar a sus crías en la bolsa marsupial y se convirtieron de forma repentina en vivíparos. Pero, ¿qué fue lo que provocó esta 'mutación'? ¿Qué pasó para que los mamíferos placentarios 'prefirieran' llevar a sus crías en desarrollo dentro del útero, lo que es la mayor ventaja evolutiva de este tipo de animales?

De la bolsa al útero: el mayor salto evolutivo fue culpa de un 'parásito' genético
Imagen: Corbis

Según un estudio realizado por especialistas de la Universidad de Yale (EE. UU.), parece que la culpa fue de un 'parásito genético'. Este grupo de científicos estadounidenses, dirigido por Gunter Wagner, profesor de ecología y la biología evolutiva, ha llegado a la conclusión de que los marsupiales antiguos pasaron a la viviparidad gracias a la aparición en su ADN de un fragmento específico.

El cambio evolutivo no fue paulatino, como se creía antes, sino brusco. Los científicos comentan en su estudio, publicado en la revista 'Nature Genetics, que investigaciones recientes describen casos cuando la pérdida o adición de un fragmento de la molécula de ADN, que cambia a su vez varias zonas del genoma, provoca extensos cambios morfológicos.

El grupo comparó el genoma de las células asociadas con el desarrollo de la placenta de los marsupiales (en concreto de las zarigüeyas, que dan a luz dos semanas después de concebir) con el de los mamíferos placentarios (armadillos y hombres). El análisis demostró que existen más de 1500 genes que se expresan solo en los mamíferos placentarios.

La mayoría de estos genes están coordinados por el transposón MER 20, elemento transponible del así llamado ADN basura, que los ancestros de los animales modernos podrían haber obtenido de un retrovirus desaparecido hace millones de años. Los transposones se mueven de manera autosuficiente a diferentes partes del genoma de una célula, creciendo como parásitos que invaden el organismo. Pero en este caso estos elementos también activan o reprimen los genes asociados con el embarazo.

Los transposones no representan mutaciones genéticas que se acumulan durante largo tiempo, sino funcionan como un mecanismo regulador creado especialmente, que se introduce en el genoma y lo reprograma para que el organismo desarrolle nuevas capacidades.