viernes, 14 de diciembre de 2012

LA TRAGEDIA DE MADRID VISTA DESDE EL CULO DE LA BOTELLA

La historia de los Viñals en el caso Madrid Arena


No permitamos que el paso del tiempo diluya la tragedia del Madrid Arena en un largo y penoso proceso indagatorio que acabe generando desmemoria en los gobernantes y desinterés en los medios de comunicación. De momento, la historia sigue y el estupor no cesa. Mires donde mires todo es irregular, o ilegal, en torno a la trágica noche de Halloween. Tanto por la parte privada del evento, donde topas con el tal Miguel Ángel Flores, un individuo incompatible con el cumplimiento de la legalidad, como si miras la confusa trama pública que te conduce hasta la alcaldesa, Ana Botella, la torpe, de la mano del vicealcalde, Miguel Ángel Villanueva.
La oficiosidad y el amiguismo es el modus operandi en el sector público si hay dinero por medio. Todo ello sobre una fronda administrativa pensada para la dilución de responsabilidades. La culpa siempre es de otro entre cientos de fallos privados causados por cientos de fallos públicos. Luego pasa lo que pasa cuando el gestor de lo público no hace bien sus deberes. Entonces llegan los muertos y el yo no fui. Ya no hay remedio para Katia, Belén, Cristina, Rocío y Teresa. Se trata de encontrar y señalar al culpable, o a los culpables. Pero nos sale al paso un lamentable espectáculo donde las partes concernidas se pasan unas a otras la patata caliente.
La oficiosidad y el amiguismo es el modus operandi en el sector público si hay dinero por medio. Todo ello sobre una fronda administrativa pensada para la dilución de responsabilidades. La culpa siempre es de otro entre cientos de fallos privados causados por cientos de fallos públicos. Luego pasa lo que pasa cuando el gestor de lo público no hace bien sus deberes. Entonces llegan los muertos y el yo no fui
Lo último es lo del anciano doctor Viñals, único responsable del servicio médico, aunque lleva siete años apartado del ejercicio activo de la profesión. El organizador de la fiesta lo contrató para aquella noche. Nada rato tratándose de Flores, más preocupado de hacer caja que de cumplir las normas. ¿Pero a todos los gestores y cargos políticos de la empresa municipal o del Ayuntamiento, comprometidos con el servicio a los ciudadanos, les pareció normal que la atención médica de la fiesta estuviera en manos de un anciano apartado de la profesión desde 2005? Por lo visto, así fue.
El servicio médico que hacía guardia aquella noche por si se producía alguna emergencia entre las 20.000 personas asistentes al desdichado guateque dependía de un médico jubilado que, eso sí, contó con la ayuda desinteresada de su hijo, Carlos Viñals. “Como mi hijo es médico colegiado, le pedí el favor. Ni yo le cobro a él ni él a mí. Colaboraba voluntariamente”, dice ahora el padre en los términos precisos para ayudar al hijo en el expediente que le han abierto por “presunta incompatibilidad en el desempeño de actividades privadas ajenas al empleo público”. Da la casualidad de que Carlos Viñals, el hijo, es el director de Proyectos y Programas del Área de Seguridad del Ayuntamiento. Y da la causalidad de que, en la misma tacada, el equipo del doctor Viñals contratado por la empresa Diviertt recomienda a su vez la contratación de dos ambulancias por 840 euros “a pagar in situ, en metálico”. Y da la casualidad de que pertenecen a una empresa de Miguel Viñals, hijo de Simón y hermano de Carlos.
Y da la casualidad de que el padre fue anteriormente consejero de la empresa municipal Madrid Espacios y Congreso, amén de concejal de Sanidad y Consumo. Un hombre fuerte del equipo del entonces alcalde, Álvarez del Manzano, y presidente del servicio público funerario cuando se produjo su escandalosa privatización. Junto a los hermanos Valdivia, uno de los compradores fue José Ignacio Rodrigo, asesor municipal hasta unos meses antes. Pelotazo al canto: quedarse por sesenta céntimos de euro con la Empresa Municipal de Servicios Funerarios de Madrid en una operación que pasó a los anales judiciales bajo el nombre de caso Funeraria.
Cuántas casualidades en el amontonamiento de lo público y/o privado.


Que un viejito médico  jubilado de mi edad no sepa que hacer con los muertos que le tiran los "seguratas"de la mujer de Aznar no debería ser noticia.
Menos si el viejito es del PP,es nazi,si su hijo es un inútil  
Para arreglar todo está el culo de la botella. .




 Los análisis con la barriga llena y no en ayunas


Una investigación asegura que los análisis han de hacerse con el estómago lleno

El investigador Francisco Pérez (EFE)
Los análisis de sangre, mejor después de comer, según el investigador Francisco Pérez Jiménez, de la Universidad de Córdoba, quien afirma que, frente a la idea tradicional, los alimentos tienen un efecto inmediato en la salud. Así lo ha señalado a Efe este catedrático de Medicina, quien esta semana ha recibido en Madrid el premio Instituto Danone-Martí Henneberg por su trayectoria científica investigadora en alimentación, nutrición y salud, dotado con 20.000 euros.

En concreto, el grupo de investigación de Pérez Jiménez estudia los efectos posprandiales -después de comer- de las grasas, que tienen "efectos inmediatos evidentes" sobre el estado de salud. Pérez explica que se ha visto que determinados alimentos, como las grasas (mantequilla o bollería), después de comer producen una serie de cambios en el organismo que pueden ser perjudiciales para la salud. Se ha observado que los lípidos -grasas- ingeridos en el desayuno, por ejemplo, tienen una influencia en el estado de oxidación e inflación de las arterias durante todo el día. "Una medición en ayunas esto no lo detectaría", aclara Pérez.

El catedrático de Medicina, que junto a su equipo ha publicado estos resultados en diversas revistas científicas, detalla que después de la ingesta de alimentos hay personas que muestran "un pico" en algunos marcadores, como los triglicéridos, lo que provoca mayor riesgo cardiovascular. "Esta elevación en forma de pico desaparece a las ocho horas, por lo que haciendo un análisis en ayunas -doce horas- los triglicéridos pueden ser normales, pero ya se ha dado un pico que es perjudicial", asegura.

Se trata en definitiva de hacer análisis más precisos que los que se hacen en ayunas. Ahora, lo que hay que hacer para extender a la práctica clínica estos análisis es estandarizar un método.

Según este científico, para la prueba de diabetes en embarazadas, por ejemplo, se sabe qué cantidad de azúcar administrar y los tiempos; en el caso de los triglicéridos habría que hacer lo mismo, saber qué dosis de grasa administrar antes de hacer un análisis. Sus estudios también han constatado que los nutrientes tienen además una función moduladora del metabolismo por medio de la cual incluso pueden activar o desactivar genes en el estado posprandial. En este sentido, Pérez indica que su grupo ha demostrado que la grasa ingerida en el desayuno produce reacciones distintas en las arterias si ésta es mantequilla o aceite de oliva, mejor.

'Nutrichip'

Otra de sus líneas de investigación es la nutrigenómica -qué tipo de alteraciones genéticas provocan que unas personas respondan de una manera u otra a los alimentos- y la nutrición personalizada. En la actualidad hay unas doscientas variantes genéticas relacionadas con la obesidad. Su equipo, en colaboración con José María Ordovás, del Centro de Investigación Nutricional de Boston, y las empresas Gendiag y Ferrer Incode, ha puesto en marcha un "nutrichip".

Se trata de una prueba de ADN a través de la saliva en la que se analizan 125 variantes genéticas y que establece si la obesidad de la persona tiene o no componentes genéticos y si esa obesidad se puede complicar con diabetes, presión arterial o colesterol. También algunas de estas variantes prevén la respuesta al ejercicio físico, consumo de calorías y tipo de dieta más beneficiosa. El 15 % de los obesos son estéticos, con ausencia de colesterol o diabetes, pero un 85 % sí tiene o tendrá esas complicaciones y, por tanto, un alto riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular. "El nutrichip te dice si esa persona tiene esos genes que pueden complicarle la obesidad y permite un tratamiento personalizado", según Pérez.

No obstante, continúa, esta herramienta no es "un milagro", pues de la obesidad aún no se conocen todos los genes implicados y el "nutrichip" estudia 125 variantes genéticas de las conocidas. Éste lo tienen desde hace unos meses sobre todo clínicas privadas y la prueba cuesta unos 500 euros.

JODANSE POR EXPLOTADORES Y LADRONES

Estudio señala que obesidad mata más gente que el hambre en el mundo capitalista desarrollado...


El informe refleja que más de tres millones de personas en todo el mundo murieron por causas relacionadas con la obesidad.
Uno de los mayores estudios en salud llevados a cabo hasta la fecha en todo el mundo señala que muere más gente por las consecuencias de la obesidad que de no tener suficiente para comer.
El reporte "La carga global de las enfermedades", publicado en la revista especializada The Lancet, estudia las principales causas de muerte en 2010 y las compara con los datos recogidos hace 20 años, cuando la desnutrición era la principal causa de enfermedad.
El informe refleja que más de tres millones de personas en todo el mundo murieron por causas relacionadas con la obesidad, tres veces más que aquellos que murieron debido a la desnutrición.
Aun así el reporte afirma que los problemas de malnutrición en África siguen causando numerosas muertes prematuras.