lunes, 11 de marzo de 2013

LA NUEVA SANIDAD DEL PP EN MADRID

Un juzgado de Badajoz ha admitido a trámite una denuncia contra Ramón Zarzuela, un médico de la Clínica del Corazón Contento que, supuestamente, decidía qué pacientes iban a someterse a un tacto rectal dependiendo de los resultados que arrojaba un test que les hacía previamente, y en el que se interesaba por aspectos que nada tenían que ver con sus dolencias.
Dónde está tu dios ahora”, murmuraba con los dedos en el ano del paciente
“Cuando estás en una consulta, no cuestionas nada por miedo. Pero me extrañó muchísimo que en el formulario me preguntaran si creía que el Real Madrid debía seguir manteniendo a Mourinho como entrenador”, explica uno de los pacientes, que asegura que el doctor susurraba “Dónde está tu dios ahora” mientras le introducía los dedos en el ano.
Un portavoz del centro hospitalario ha explicado a los medios que el doctor Zarzuela tiene una gran reputación como especialista en el aparato digestivo, pero ha admitido que, precisamente por ello, suele tomarse las cosas de modo muy visceral.
“Hay detalles que le repatean el estómago, y probablemente con esos tactos rectales intentaba corregir los desarreglos físicos y también los ideológicos”, añade el portavoz, que niega que la entidad tuviera conocimiento del contenido de estos tests que Zarzuela obligaba a realizar en su consulta.
Una investigación preliminar ha confirmado que el 95% de los enfermos que eran sometidos a una exploración rectal en la consulta de este médico eran votantes del Partido Popular y estaban a favor de la privatización de la Sanidad. Un 25% de ellos reconsideraba su postura tras someterse al tacto rectal, hasta el punto de que algunos de ellos se convertían en acérrimos militantes de Izquierda Unida.
JESÚS EZCURRA | Psiquiatra

“Antes de la crisis había más suicidios que ahora”

"Hemos vivido en una sociedad hedonista que no ha tenido la cabeza bien amueblada", opina el jefe de servicios de la Red de Salud Mental de Álava

.
Jesús Ezcurra (Beire, Navarra, 1948), psiquiatra y jefe de servicios de la Red de Salud Mental de Álava, sostiene que, al contrario de la percepción social de que los suicidios han aumentado por la crisis y los desahucios, ha sido en tiempos de bonanza económica cuando se han registrado más muertes por esa causa. Este profesional de Osakidetza, quien acaba de participar en unas jornadas sobre psiquiatría en Vitoria, critica que los medios de comunicación están tratando estos casos de manera “sensacionalista”.
Pregunta. ¿Sigue siendo la salud mental una cuestión tabú?
Respuesta. En parte, sí. Por ello estamos luchando contra el estigma que supone ir al psiquiatra. Las personas, como los coches, necesitan un tubo de escape y, si se tapa, el coche explota. Cada uno deberá ver cuál es el suyo: las amistades, la familia o el sistema sanitario.
P. El Eustat cifra el incremento de los suicidios en 2011 en un 31%. ¿Qué relación ve entre ese aumento y la crisis económica?
R. El suicidio es un tema muy complejo en el que influyen muchas variables. No podemos saber si una persona se suicida solo por una mala situación económica, o de vivienda, o porque a eso hay que añadirle otros problemas depresivos anteriores.
P. El presidente de la Asociación Española de Psiquiatría, Miguel Gutiérrez, critica la forma en la que los medios informan de los suicidios. ¿Cree que se deberían ocultar estas noticias?
R. Suscribo las palabras de Miguel Gutiérrez. Las valoraciones se deben hacer desde un punto de vista científico y no a golpes de corazón, y los medios están cayendo en el sensacionalismo. Hasta ahora había un pacto entre las autoridades sanitarias y los medios para no comunicar los suicidios y para no darles este aire tan dramático. Me consta que la mayoría de profesionales médicos están de acuerdo conmigo, lo que no quiere decir que no estemos sensibilizados con lo que está ocurriendo.
P. ¿Qué efectos pueden tener esas informaciones?
R. El mimetismo; que surjan personas que, por su situación familiar o sus convicciones religiosas, jamás se habían planteado esa posibilidad, pero que, al dejar de verlo como algo excepcional, decidan dar ese paso.
P. ¿Cómo puede afectar el actual descontento social a la salud mental?
R. Hay que evitar la desesperanza. Hay una generación de gente muy preparada que debe saber que la crisis no durará para siempre.
P. La OMS considera que informar de los suicidios de manera apropiada a través de los medios puede prevenir una trágica pérdida de vidas. ¿Cómo propone que se haga?
R. Hay que enfocarlo dentro de las instituciones sanitarias y los centros de salud; que sean los profesionales los que busquen la forma de prevenir ese tipo de casos.
Los medios están cayendo en el sensacionalismo con los suicidios”
P. Aparte de los suicidios, la crisis está haciendo crecer los casos de otro tipo de enfermedades mentales, como la depresión. ¿Las consecuencias podrían resultar irreversibles?
R. Un estudio de la Universidad de Baleares refleja que los casos de ansiedad, insomnio y estrés han aumentado considerablemente. Es lógico que alguien en paro, con una hipoteca y una familia a la que alimentar, sufra estrés y requiera ayuda profesional.
P. El dinero no da la felicidad pero, ¿éramos más felices cuando la economía iba mejor?
R. Datos del Instituto Nacional de Estadística muestran que en los momentos de la burbuja económica había más suicidios que en la actualidad. La carrera por ser el que más tiene también genera mucha frustración.
P. El psiquiatra Luis Rojas Marcos sostiene que, tras un periodo negativo, las sociedades encuentran la felicidad en cuestiones más simples. ¿Ve posible algo así cuando la crisis haya terminado?
R. Sí. La gente ya empieza a valorar más cosas, como ir al monte o comerse una tortilla. Hay que fijarse objetivos más realistas. Una cosa es luchar por mejorar y otra cosa es caer en la corriente del consumismo. Hemos vivido en una sociedad hedonista que no ha tenido la cabeza bien amueblada.
P. ¿Qué consejos daría a aquellas personas que se encuentran en una mala situación económica para evitar que se desestabilicen emocionalmente?
R. Cada caso es particular. Hay que darse cuenta de que no se trata solo de ayudar a alguien a buscar trabajo. También hay que ayudarle a que tenga fuerzas para luchar.
P. ¿La psiquiatría también está sufriendo los recortes que están aplicando los Gobiernos? ¿En qué lo están notando en su trabajo?
R. Nosotros por el momento no los estamos notando, pero no podemos dejar de advertir a los responsables políticos que tienen que evitarlo. Recortar en sanidad supone bajar la calidad asistencial. En el País Vasco se ha construido un buen sistema de salud mental, pero hay que seguir poniendo los ladrillos.