jueves, 14 de diciembre de 2017

Los perros ayudaron a la humanidad a sobrevivir

El descubrimiento de unos grabados en Arabia Saudí muestra que los hombres ya cazaban con canes hace 8.000 años y que fueron fundamentales para su supervivenciOtros

Grabados de perros y humanos datados hace 8.0009.000 años en Arabia Saudí.
Grabados de perros y humanos datados hace 8.000/9.000 años en Arabia Saudí.  PALAEODESERTS SURVEY
Los científicos siguen tratando de comprender cuándo y cómo, hace miles de años, comenzó la relación de los humanos con los perros. Unos grabados descubiertos recientemente en Arabia Saudí, que muestran a hombres y canes cazando juntos, y controlados con correas, ayudan a comprender algo mucho más importante: sin los primeros animales que domesticamos, nuestra supervivencia como especie hubiese sido mucho más complicada, incluso imposible.
Los trabajos sobre el origen del perro se basan por un lado en investigaciones del ADN antiguo para descubrir cuándo se separó del lobo —las últimas hipótesis apuntan a que los primeros surgieron hace unos 33.000 años en Asia y en tratar de deducir la forma en que se produjo la domesticación las últimas hipótesis apuntan a que fueron ellos los que nos domesticaron, los que se acercaron a los asentamientos en busca de comida.
Por otra parte, también rastrean evidencias arqueológicas que demuestren desde qué momento compartimos el mismo espacio y, sobre todo, para qué los utilizábamos.
Los grabados descubiertos en el noroeste de Arabia Saudí, en los yacimientos de Shuwaymis y Jubbah, representan un gran avance: están entre las imágenes más antiguas de perros, ya que tienen entre 8.000 y 9.000 años (todo indica que son las más remotas, aunque existe una cerámica en Irán con perros de hace ocho milenios), pero, sobre todo, son las primeras que muestran el trabajo conjunto con los humanos. En total aparecen en 350 grabados y en unos cuantos se les ve claramente cazando, a veces sujetos con correas, acompañando a hombres armados. Por su aspecto podría tratarse de una raza que todavía existe: los perros de Canaán. Un problema es que las dataciones no son directas, sino que se basan en yacimientos de su entorno, lo que siempre crea controversias.
Dos perros ante un león, grabados hace 8.0009.000 años.
Dos perros ante un león, grabados hace 8.000/9.000 años. PALAEODESERTS SURVEY
"Las imágenes nos muestran que los cazadores controlaban a los perros y que les utilizaban para sus estrategias de caza, mucho antes de que hubiesen sido domesticado otros animales, como vacas o cabras. Hasta ahora no estaba claro si los perros se sentían atraídos por los asentamientos humanos o si fueron domesticados activamente", explica Maria Guagnin, investigadora asociada del Instituto Max Planck, actualmente en la Universidad Libre de Berlín y una de las autoras del trabajo, publicado en el Journal of Anthropological Archaeology. "El uso de perros incrementa las posibilidades de cazar y ayuda a los humanos a sobrevivir, especialmente cuando la comida es escasa y sólo está disponible en ciertos momentos del año", agrega Guagnin.
Aunque asegura que se trata de un hallazgo difícil de datar, el investigador de la Escuela de la Arqueología de la Universidad de Oxford, Greger Larson y uno de los principales investigadores del origen de los perros, reconoce la importancia del descubrimiento. "Parece razonable pensar que son perros y que los humanos cazan con ellos. Me parece que es más difícil interpretar si se trata de correas, pero es indudable que trabajan juntos", asegura. El lugar del descubrimiento, en cambio, aporta dos informaciones cruciales: el neolítico, esto es, la agricultura y la domesticación de otros animales, no había llegado hasta allí todavía y, lo que es más importante, está fuera del alcance natural del lobo. Esto quiere decir que son perros domesticados anteriormente, que viajaron hasta allí con los humanos.
Larson es uno de los impulsores de la creación de una enorme base de datos genética para analizar ADN de perros prehistóricos, el Palaeogenomics & Bio-Archaeology Research Network. "Los principios son siempre muy difíciles de identificar. El origen genético de los perros sigue siendo un lío", explica Larson. La investigadora Mietje Germonpré, del departamento de paleontología del Real Instituto Belga de Ciencias Naturales, participa en ese proyecto y fue una de las descubridoras de un cráneo, posiblemente de perro, de unos 32.000 años de antigüedad, encontrado en la cueva belga en Goyet. Sin embargo, este descubrimiento tiene sus detractores y el debate sobre el origen del perro se mueve en una inmensa horquilla que va desde los 10.000 a los 38.000 años. El momento en el que acaba el lobo y empieza el perro no está fijado por la ciencia.
Pero los dibujos de Arabia Saudí abren una nueva perspectiva porque la relación quedó grabada en la piedra. "Muy probablemente tenían una gran importancia para los hombres porque están conectados mediante correas. Todo esto sugiere que su presencia en la caza era muy útil y que las presas podían ser encontradas, y matadas, mucho más fácilmente gracias a los perros", asegura Germonpré. Robert Losey, profesor de Antropología en la Universidad de Alberta (Canadá) y uno de los grandes estudiosos de la relación entre perros y hombres, señala por su parte: "Estas imágenes indican que hemos vivido cerca de los perros desde hace miles de años. Y que llevamos milenios cazando con perros. Se sospechaba desde hace mucho, pero hasta ahora no se había demostrado con evidencias arqueológicas".
Preguntado sobre si los perros nos ayudaron a sobrevivir, el profesor Losey se muestra rotundo: "Sin ninguna duda. En algunas situaciones, los perros pueden aumentar mucho nuestra habilidades. Si no llegan a estar con nosotros, es muy posible que no siguiésemos aquí".
Un estudio relaciona la alimentación con el bienestar infantil

Comida sana, niños felices

    Una dieta saludable se asocia con una mejor autoestima y menos problemas emocionales en los menores, independientemente de su peso. Así concluye un nuevo estudio realizado en ocho países, entre ellos España, que también recoge datos a la inversa: la autoestima se vincula con pautas que restringen el consumo de azúcares y grasas, y fomentan el de pescados y verduras.
    .
    <p>El consumo recomendado de frutas, verduras, azúcar y grasa se relaciona con el bienestar infantil. / <a href="https://pixabay.com/es/sand%C3%ADa-verano-ni%C3%B1a-comiendo-sand%C3%ADa-846357/" target="_blank">Pixabay</a></p>
    El consumo recomendado de frutas, verduras, azúcar y grasa se relaciona con el bienestar infantil. / Pixabay
    Tener pocos amigos o ser objeto de burlas son algunos de los problemas emocionales que sufren cada día muchos niños y niñas. Ahora, un estudio publicado en la revista BMC Public Health vincula estos aspectos con la alimentación.
    El trabajo asocia la ingesta de productos saludables con una mejor autoestima y menos trastornos emocionales en los menores, independientemente del peso corporal. De la misma forma, una mejor autoestima se relaciona con una mejor adherencia a las pautas de alimentación sana.
    “Una dieta saludable puede mejorar el bienestar de los niños”, explica Louise Arvidsson, una de las autoras de la Universidad de Gotemburgo (Suecia). “En los pequeños hay una asociación entre el cumplimiento de las pautas dietéticas saludables y un mejor bienestar psicológico –lo que incluye menos problemas emocionales, mejores relaciones con otros niños y una mayor autoestima– dos años después".
    La asociación entre dieta inicial y bienestar fue independiente de la posición socioeconómica de los niños y su peso corporal
    Tras examinar a 7.675 niños de dos a nueve años de ocho países europeos (Bélgica, Chipre, Estonia, Alemania, Hungría, España y Suecia), los investigadores encontraron que una puntuación mayor en un índice de adherencia alimentaria saludable (HDAS) al inicio del estudio estaba asociado con una mejor autoestima y menos problemas emocionales y con sus semejantes un par de años después.
    Además, las asociaciones entre HDAS y el bienestar fueron similares para los niños que tenían un peso normal y los que sufrían sobrepeso. "Fue sorprendente descubrir que la asociación entre la dieta inicial y un mayor bienestar dos años después era independiente de la posición socioeconómica de los niños y su peso corporal", añade Arvidsson.
    El HDAS tiene como objetivo capturar el cumplimiento de las pautas dietéticas saludables, que incluyen limitar la ingesta de azúcares refinados, reducir las grasas y comer frutas y verduras. Un HDAS más alto indica una mejor adherencia a las recomendaciones, es decir, una alimentación más saludable. Las pautas son comunes a los ocho países incluidos en este estudio.
    Más pescado y verduras
    Los autores utilizaron datos de un estudio prospectivo de cohortes que pretende comprender cómo prevenir el sobrepeso en los niños y al mismo tiempo considerar los múltiples factores que contribuyen a ello.
    Al comienzo del período de estudio, se les pidió a los padres que informaran con qué frecuencia por semana sus hijos consumían alimentos de una lista de 43 artículos. Dependiendo de su consumo de estos alimentos, a los niños se les asignó una puntuación HDAS.
    El bienestar psicosocial se evaluó en función de la autoestima, las relaciones con los padres, los problemas emocionales y con los compañeros. También se midieron la altura y el peso de los niños. Todos los cuestionarios se repitieron dos años después.
    El estudio es el primero en analizar los componentes individuales incluidos en el HDAS y sus asociaciones con el bienestar de los niños. Los autores encontraron que la ingesta de pescado de acuerdo con las directrices (2-3 veces por semana) se asoció con una mejor autoestima y con una ausencia de problemas emocionales y entre compañeros. La ingesta de productos integrales se asoció con una falta de conflictos entre iguales.
    Como el estudio es observacional y se basa en datos facilitados por los padres, no es posible extraer conclusiones sobre la causa y el efecto
    Las asociaciones iban en ambas direcciones, es decir, un mejor bienestar se relaciona con el consumo recomendado de frutas, verduras, azúcar y grasa; una mejor autoestima se asocia con la ingesta de azúcar de acuerdo con las directrices; las buenas relaciones con los padres con el consumo de frutas y verduras ponderado; menos problemas emocionales con la toma de grasa aceptable; y menos problemas con los compañeros se asocian con el consumo de frutas y verduras saludable.
    Los resultados deben confirmarse
    Los autores advierten que los niños con mala alimentación y bajo bienestar eran más propensos a abandonar los estudios y, por tanto, estaban subrepresentados en el seguimiento a dos años, lo que complica las conclusiones acerca de las verdaderas tasas de mala alimentación y bajo bienestar.
    Es más, como el estudio es observacional y se basa en datos facilitados por los padres, no es posible extraer conclusiones sobre la causa y el efecto. "Estas asociaciones deben confirmarse en estudios experimentales que tengan en cuenta a los niños con diagnóstico clínico de depresión, ansiedad u otros trastornos del comportamiento, en lugar del bienestar informado por los padres", concluye Arvidsson.
    Referencia bibliográfica:
    Arvidsson et al.: Bidirectional associations between psychosocial well-being and adherence to healthy dietary guidelines in European children: prospective findings from the IDEFICS study. BMC Public Health 2017 DOI: 10.1186/s12889-017-4920-5

    La sorprendente razón por la que la gripe afecta más a los hombres

    El primer estudio sobre el tema, llevado a cabo en Canadá, arroja interesantes conclusiones

    Si en tu casa viven varias personas, sabrás de sobra que cuando la gripe entra en el hogar es difícil que alguien se libre. Uno detrás de otro, todo el mundo va cayendo enfermo; aunque también es cierto que el virus no golpea a todos con la misma fuerza. Mientras que algunas personas necesitan muchos días para superar los síntomas, otras recuperan la buena salud en poco tiempo. ¿Está esto relacionado con el hecho de ser hombre o mujer? Según las pesquisas de un estudio realizado en Canadá, es probable que así sea.
    El blog Slate recoge las conclusiones de una investigación llevada a cabo por el doctor Kyle Sue en la universidad canadiense de Newfoundland, a partir de un artículo originalmente publicado en el British Medical Journal. Este médico ha descubierto que las tasas de hospitalización y mortalidad por gripe son significativamente superiores entre la población masculina. Eso no es todo: las vacunas contra esta enfermedad también parecen ser considerablemente más eficaces entre las féminas.
    El doctor Sue sostiene que existen evidencias de que el sistema inmune masculino es menos robusto que el de las mujeres. Así, los hombres pueden estar ante un riesgo mayor de sufrir enfermedades respiratorias, además de experimentar mayores complicaciones en cuanto el virus entra en su organismo. Una de las hipótesis manejadas por el investigador tiene que ver con la evolución natural: los hombres habrían invertido más energía en otros procesos biológicos, como el crecimiento, en lugar de desarrollar un sistema inmune potente.
    Desde hace algún tiempo los científicos saben que la testosterona tiende a suprimir la respuesta del cuerpo a las infecciones, mientras que los estrógenos suelen estimular esta réplica, algo que da ciertas ventajas a las mujeres. En cualquier caso, los estudios relacionados con estas cuestiones todavía no han alcanzado suficiente profundidad como para considerarse concluyentes. Pero si en tu casa los hombres sufren más con la gripe que las mujeres, puedes ofrecerles un pequeño consuelo: la ciencia está trabajando en ello.